La cinematografía en la obra de Mario Vargas Llosa
Por: Juan Carlos Suárez Revollar
No es nuevo destacar la relación entre la obra narrativa de Mario Vargas Llosa y el cine, tanto respecto a las versiones fílmicas de sus libros como a los recursos cinematográficos de los que ha echado mano para enriquecerlos; eso sin contar las muchas referencias y menciones de títulos de películas en éstos.
Desde el montaje de la historia —aspecto esencial en la construcción de un filme—, Mario Vargas Llosa ha usado frecuentemente técnicas y formas cinematográficas. Así, La casa verde es un relato montado —se nota esto también en Conversación en La Catedral—, donde las secuencias se unen para armar el todo que es la novela, aunque es tal la cantidad de técnicas narr

En Conversación en La Catedral se hace uso de técnicas cinematográficas como el corte, las disolvencias y los fundidos en negro entre escena y escena. En toda la primera parte las tomas se superponen dentro de grandes secuencias —los capítulos—: cada párrafo se sitúa en un tiempo y contexto diferentes, y el siguiente lo hace a través de un corte simple. Los niveles de la narración, entonces, abarcan un lapso temporal y espacial muy amplio. Podemos ver a un personaje viviendo un suceso en un momento y de pronto a él mismo, en otro lugar y muchos años después, recordándolo. De esa forma, el punto en común de ambas escenas viene a ser el hecho, primero vivido y después evocado.
Por otro lado, Vargas Llosa ha tenido poca suerte con las versiones fílmicas de sus libros, todas de muy bajo nivel artístico. Empero, hay un buen número de películas que se han hecho a partir de su obra: de la novela La ciudad y los perros Francisco Lombardi rodó un largometraje, pero hay otro, ruso, mucho menos conocido: Yaguar. Los cachorros es un mediocre filme mexicano de 1973. La tía Julia y el escribidor, por su parte, se estrenó como Tune in Tomorrow..

Publicado en Correo de Huancayo, el 18 de julio de 2009.