sábado, 20 de marzo de 2010

Función continuada: La isla siniestra

Solo contra el mundo
 
Juan Carlos Suárez Revollar

Martin Scorsese (Nueva York, 1942) es uno de los más renombrados realizadores de su generación. Desde sus primeros trabajos —de ‘Taxi Driver’ y ‘Toro salvaje’ a ‘Buenos muchachos’ y ‘Pandillas de Nueva York’— destaca el marcado culto a la violencia, que se retrata con frialdad y hasta sordidez, a la vez que con intensidad e intrepidez.
Su última cinta, ‘La isla siniestra’, es una historia llena de vueltas de tuerca, donde el detective Teddy Daniels (Leonardo DiCaprio) ha sido encomendado para encontrar a una paciente que ha huido del sanatorio mental para enfermos de alta peligrosidad, ubicado, precisamente, en la Isla Shutter, que da nombre al filme.
Aunque desde el inicio la historia se avizora, digamos, predecible, Scorsese demuestra su oficio, pues mantiene la tensión dramática ascendente y sostenible. Sin embargo, hay dos defectos sustanciales: el primero la excesiva duración (como en ‘El aviador’, y más aún, en ‘Infiltrados’), ya que podría haberse contado lo mismo en mucho menos tiempo evitando incluir hechos innecesarios (como una de las escenas finales, de la muerte de la esposa y los hijos, que ya se sobreentendía); y el segundo el afán de explicarlo todo, lo cual elimina toda posibilidad de ambigüedad que podría haber enriquecido mucho al filme.
Los flash back que Scorsese nos remite desde el subconsciente de Teddy —con un poderoso discurso antinazi—, empiezan con mucha lógica, y se van diluyendo, entremezclados con las alucinaciones y la probable realidad, según avanza la historia y la degradación mental de Teddy. Las tonalidades de la fotografía, aunadas con la cámara trepidante refuerzan el clima de encierro, ansiedad y demencia. Y el final que obliga al espectador a replantearse lo visto, más el buen ritmo narrativo, hacen de ‘La isla siniestra’ una película interesante y entretenida.

LA ISLA SINIESTRA
Director: Martin Scorsese
Título original: Shutter Island
Duración: 138 minutos
País y año: Estados Unidos, 2009
Idioma: inglés con subtítulos en español

Publicado en el diario Correo de Huancayo, el 20 de marzo de 2010.

lunes, 8 de marzo de 2010

Función continuada: Invictus

El hombre que perseguía un sueño

Juan Carlos Suárez Revollar

‘Invictus’ se inicia con el acceso de Nelson Mandela (Morgan Freeman) —una de las figuras más emblemáticas de la lucha por los derechos humanos en la segunda mitad del siglo XX— a la presidencia de Sudáfrica. Además de todo el desastre que debe componer (de décadas enteras de un gobierno cruel e inhumano, además del reciente Apartheid), intenta algo poco menos que imposible: la reconciliación entre la mayoría negra, ahora en el poder, y la minoría blanca, otrora gobernante. El filme no está enfocado propiamente en los esfuerzos del nuevo gobierno por alcanzar este objetivo, sino en algo de mucha menor importancia: la busca del triunfo del pésimo equipo sudafricano de rugby, como una vía para hermanar a los habitantes del país.
Sin lograr los resultados de sus mejores películas, Clint Eastwood ha alcanzado en ‘Invictus’ un gran nivel. La potente imagen de Mandela, por quien Eastwood no oculta su admiración, se nos muestra ascética y hasta mesiánica, lo cual le restaría credibilidad a no ser por la eficaz introducción de los problemas familiares que lo agobian, pues en el filme es un ser humano (extraordinario pero humano al fin). Se refuerza este retrato a través de las impresiones de los otros personajes: unos más pasionales (su jefe de seguridad o su secretaria) o, en la otra orilla, y receloso al principio, Francois Pienaar (Matt Damon), el capitán del equipo.
‘Invictus’ es un filme político, pese a haberse atenuado esta característica por el tema de fondo: los deportes. Empero, no por ello desaparece, pues determina o influye en las acciones de los personajes.
Eastwood no es un renovador en el uso de los códigos cinematográficos. Sí es un maestro, en cambio, en su aplicación, con un sentido clásico, e ‘Invictus’ es una bella muestra de ello.


INVICTUS

Director: Clint Eastwood

Duración: 133 minutos

Idioma: inglés con subtítulos en español

País y año: Estados Unidos, 2009

Publicado en el diario Correo de Huancayo, el sábado 6 de marzo de 2010.